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Vertavillo

Un pueblo sin coches y muy español

En pleno Cerrato palentino, este pueblo está rodeado de cerros ondulados y páramos calcáreos donde la naturaleza excava cuevas de belleza sorprendente. Sus calles, prácticamente sin coches (porque no caben), tienen casas bien construidas, algunas de estilo castellano en piedra.

El corazón de la localidad se encuentra en su plaza Mayor donde está el ayuntamiento. Curiosamente, todo el edificio está pintado de amarillo y rojo, como la bandera española. Desde allí puede verse la portada románica de su iglesia de San Miguel, iniciada en el siglo XII, con varias remodelaciones hasta el XVII. Su cuerpo está dividido en tres naves con crucero y techumbre mudéjar policromada. De sus ocho ermitas queda la del Santo Cristo del Consuelo, del siglo XVII, que vigila desde un alto.

Al este, próximo a un arco apuntado de las antiguas murallas que rodeaban Vertavillo, se sitúa elevado el rollo jurisdiccional que se remata con gárgolas y un escudo de águilas.

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