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Según el Diccionario de la Real Academia de la Lengua un chiringuito es un quisco o un puesto de bebidas al aire libre. Pero los playeros empedernidos somos menos puristas y sabemos que es eso y mucho más. Es el lugar donde tomarte unos camarones o un pescado fresco, o simplemente un mojito o una caña, pero siempre con el mar a escasos metros para darte un chapuzón cuando llegue la sobremesa. Aquí te proponemos cinco chiringuitos con Solete para descubrir este verano en Canarias.
La ‘Cofradía de La Punta’, en San Cristóbal de La Laguna, hace tiempo que se convirtió en todo un clásico. Sus lapas con mojo, su escaldón y sus pescados frescos son bien conocidos por muchos habitantes de Tenerife, que acuden regularmente hasta esta zona costera del segundo municipio más poblado de la isla para degustar buenos platos a precios ajustados.
Comer mirando el mar norteño es un regalo; también que de postre puedas echarte unas brazadas en las emblemáticas piscinas naturales de La Punta. Será difícil que se te vaya la sal del cuerpo. Se pega a la piel como los mejores recuerdos. Si quieres una experiencia auténtica, alejada del mundanal ruido del todo incluido, este es tu sitio. Eso sí: reserva, porque la voz se ha corrido y su éxito no es ningún secreto.
Este chiringuito clásico se encuentra en una playa de arena negra única, ya que está rodeada de plantaciones de plátanos y enclavada en El Rincón, una zona de alto interés paisajístico y natural. La playa El Bollullo es uno de los lugares preferidos por los locales que buscan alejarse del turismo masivo, más frecuente en el sur de Tenerife. El ‘Bollullo Beach’ ha ido ampliando su carta a lo largo de los años y ya ofrece muchísimo más que lapas y cervezas. Luis, uno de los socios al frente del negocio desde hace tres años, destaca la clave del éxito: “Siempre usamos producto fresco, pescado fresco, y lo que hay en la carta lo elaboramos nosotros: las croquetas, las empanadillas…”. Eso atrae tanto a visitantes como a autóctonos de La Orotava.
Además del local en la playa, cuentan con otro restaurante en la zona alta. Ofrecen brunch y organizan eventos -todo depende de lo que andes buscando-, además de regalar unas vistas de ensueño. Puedes ir en coche y aparcar antes de bajar hasta la playa -está al final de una ladera, aunque se accede con relativa facilidad-, pero si eres de caminar es recomendable ir dando un paseo desde La Paz (Puerto de la Cruz). Merece la pena. Y, una vez en la playa, es conveniente tener en cuenta que en esta zona el mar no siempre es manso.
Papas arrugadas, queso frito, puntillitas de calamar, croquetas de marisco o chocos; todo ello, con vistas inmejorables a la playa. Este establecimiento, a medio camino entre el bar de toda la vida y el chiringuito, ofrece raciones y medias raciones a turistas y gente local.
Ubicado en una vía que transcurre junto a la costa de Puerto del Rosario, cuenta con una amplia terraza a apenas 50 metros de la arena. Es recomendable reservar si quieres picar algo en fin de semana.
Playa Blanca es uno de esos lugares que uno no debería dejar de visitar en su vida. Arena blanca bañada por un azul turquesa que no podrás dejar de mirar. En este enclave de película se encuentra el ‘Chiringuito Tropical’, en plena avenida marítima, prácticamente a pie de arena.
Se trata de un chiringuito tradicional y vanguardista a la vez. Habitualmente abre de diez de la mañana a diez de la noche y su especialidad es el arroz. “Los hacemos muy buenos”, reconoce Luis, su dueño, que cuenta que desde hace un tiempo han decidido, además, organizar cenas gourmet para un público selecto. Durante los viernes del verano, el chiringuito trae a Yaiza varios chefs de prestigio para que elaboren un menú degustación para 30 personas que ronda los 40 euros. El éxito es tal que hay hasta quien reserva de un año para otro. Además de los ingredientes de calidad y de la profesionalidad, ofrecen algo imprescindible: “muy buen rollo”.
Fritos, pescados a la plancha, ensalada, pulpo… ‘Amigo Camilo’ tiene una carta corta pero bien escogida que se ha ido ganando a una clientela fiel en Las Palmas de Gran Canaria. Además, cuenta con un mostrador con una pequeña lonja donde elegir el producto que se quiere degustar.
Aunque tiene interior, la mejor opción es pedir mesa en la terraza y disfrutar de las vistas a El Confital. Como el local se encuentra en uno de los extremos del paseo de Las Canteras, a apenas unos 150 metros de la mejor playa urbana de Canarias, no es mala idea dar un paseo para bajar la comida antes del chapuzón. Aunque estés en Gran Canaria, si el cielo está despejado puedes ver hasta el Teide.
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/guia_ALF_6897.jpg.transform/rp-rendition-lg/image.jpg "La panadería de barrio que cautiva a los Soles de Madrid")
