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Donde come Maca de Castro ('El Jardín')

"De 'Zuberoa' guardo un recuerdo muy especial"

Actualizado: 17/08/2016

No hay quien la mueva de su restaurante durante todo el verano, porque es de las que "quiere estar" para recibir, como la buenísima anfitriona que es, a quien visite 'El Jardín'. En su menú, que prefiere llamar "la lista de la compra", cada pase es un dardo de sabor que da en la diana del producto.

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De verbo hábil, ideas claras, amplia sonrisa (aunque a veces parezca mucho más seria de lo que es) y con una suerte de fuerza redoblada para el trabajo. Así es Maca de Castro, una cocinera mallorquina que ha convertido a la localidad de Alcudia en el epicentro más cambiante de la gastronomía local.

El dinamismo es la variable constante en el restaurante 'Jardín', su apuesta más técnica, "eso nos hace que no paremos y nos tiene todo el tiempo en marcha.Tengo platos que pueden estar un mes y puede haber otros que quizá estén solo cuatro días. Todo depende de la temporada". Incrédula de las recetas perfectas, defiende el producto y disfruta escapándose de vez en cuando a estos tres templos gastronómicos.

'RESTAURANTE SA ROQUETA' - Calle sirena, 11. Palma de Mallorca. Tel. 971 24 94 10.

En este lugar, dice, encuentra el mejor producto del mar que, aunque parezca imposible, no es siempre es fácil de conseguir en Mallorca. "'Sa Roqueta' siempre ha trabajado producto de aquí. Hacen muchos guisos de legumbres con gamba roja o calamar de potera. Es un restaurante marinero antiguo, muy antiguo".

'ZUBEROA' - Araneder Bidea, Barrio Iturriotz. Oiartzun. Gipuzkoa. Tel. 943 49 12 28.

"Si voy al norte de España no dejo de visitar a Hilario Arbelaitz. Él, además de un gran maestro y amigo, refleja también mi cocina", dice. De este restaurante guarda un recuerdo especial porque fue allí donde empezó a gestarse su indivisible nexo con la gastronomía.

'KABUKI' - Avenida Presidente Carmona, 2. Madrid. Tel. 914 17 64 15.

Siguiendo su muy bien definida línea maestra, en la que priman el sabor y el respeto por el producto, cuando viaja a Madrid visita a Ricardo Sanz. "Poca gente trabaja como Ricardo. Me preocupa que los cocineros estemos perdiendo el norte, buscando protagonismo y no preocupándonos porque nuestras casas estén llenas. Ese es nuestro trabajo: que los restaurantes funcionen bien y los clientes se vayan encantados".

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