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Pelayos del Arroyo

Una iglesia románica con tesoros en su interior

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Pelayos del Arroyo perteneció al Obispado de Segovia hasta que lo vendió a Pedro de Zúñiga, Duque de Béjar, después de la Guerra de las Comunidades de Castilla. El municipio, una pequeña aldea rural a 25 km de la capital, sufre una progresiva despoblación. Apenas cuenta con medio centenar de habitantes.

La iglesia parroquial de San Vicente, edificada entre los siglos XII y XIII, fue declarada Monumento Histórico Artístico en el año 1981. Se localiza en uno de los extremos del pueblo y ha sido reformada en diferentes ocasiones. Se trata de un templo modesto, con elementos llamativos en su interior, que custodia una colección de canecillos entre los que destacan los del muro septentrional. Hay bustos humanos, aves, ciervos y demonios. En el interior también se pueden apreciar algunos restos de pinturas murales del siglo XIII.

La localidad de Tenzuela está situada dentro del término municipal de Pelayos del Arroyo y en ella se alza la iglesia románica de San Miguel Arcángel con los bellos capiteles de su pórtico en la portada principal.

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