Parroquia San Sebastián de Soreasu

Azpeitia, Gipuzkoa/Guipúzcoa

Qué ver

Solo la antigua torre, de aspecto claramente gótico con sus pináculos y ventanitas, ha sobrevivido, aunque transformada, del antiguo templo, probablemente de origen templario, que se erigió en la localidad. De estilo gótico vasco, en los siglos. XVI y XVII la parroquia San Sebastián de Soreasu sufrió importantes reformas y en 1771, el maestro Ventura Rodríguez diseñó un elegante frontispicio, de estilo plateresco, para sustituir el pórtico que le da a la fachada un aire de templo clásico. Al cruzar el monumental arco entraremos en un recinto cargado de espiritualidad y simbolismo. Varios retablos entre los que destaca el barroco mayor adornan el interior de la parroquia. De las ocho capillas que encontraremos en la iglesia, sobresale como un diamante, la capilla de la Soledad.
Construida gracias al testamento de uno de los capitanes que acompañó a Pizarro en la conquista de Perú, Nicolás Sáez de Elola, tanto su estructura como su decoración, entre ella un mural descubierto tras unas obras de restauración, no dejan lugar a dudas sobre su origen renacentista. De hecho, cuando nos encontremos dentro de la capilla estaremos contemplando una perla en ese estilo. No podemos despedirnos de San Sebastián de Soreasu sin acercarnos a contemplar una de las joyas del templo: la pila bautismal de San Ignacio de Loyola, una maravilla de piedra labrada y con armazón de madera que como los grandes tesoros se encuentra protegida por una gran verja barroca.